1 taza de yogur natural (preferiblemente yogur sin azúcar)
1 taza de agua fría
1/4 de cucharadita de sal (ajustar al gusto)
Hojas de menta fresca (opcional, para decorar)
Preparación:
Mezclar los ingredientes: En un tazón o batidora, combina el yogur, el agua fría y la sal. Mezcla bien hasta que la mezcla sea homogénea y tenga una consistencia suave.
Batir: Puedes usar una batidora o un batidor manual para airear la mezcla y darle una textura más espumosa. Asegúrate de que no queden grumos.
Probar y ajustar: Prueba el ayran y ajusta la sal según tus preferencias. Algunas personas prefieren un Ayran más salado, mientras que otras lo prefieren más suave.
Servir: Vierte el Ayran en vasos y, si lo deseas, decora con hojas de menta fresca.
Consejos adicionales:
Yogur: Elige un yogur de buena calidad para obtener el mejor sabor y textura. El yogur griego es una opción popular para un Ayran más cremoso.
Variaciones: Algunas recetas incluyen un toque de limón o ajo para un sabor adicional.
Frío: El Ayran se disfruta mejor frío, así que asegúrate de usar agua fría y servirlo con hielo si lo prefieres.
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