1 litro de yogur natural entero (sin azúcar ni saborizantes, preferiblemente yogur griego)
1 cucharadita de sal (ajustable al gusto)
Aceite de oliva virgen extra (para servir)
Zaatar, menta fresca, o nueces picadas (opcional, para decorar)
Preparación:
Preparar el Labneh:
Mezclar el yogur con sal: En un tazón, mezcla el yogur con la sal. Esto ayudará a realzar el sabor del labneh y también a extraer el exceso de líquido (suero) del yogur.
Colocar en una tela de muselina: Coloca un colador grande sobre un tazón profundo y forra el colador con una tela de muselina, una gasa o un paño de cocina limpio. Vierte el yogur salado en el centro del paño.
Atar la tela: Junta los bordes de la tela y átala en la parte superior para formar un paquete. Asegúrate de que el yogur esté bien envuelto y colócalo en el colador para que el suero comience a escurrir.
Drenar el yogur:
Dejar drenar: Coloca el colador con el yogur en el refrigerador y deja que el líquido se escurra lentamente. El tiempo de escurrido depende de la consistencia que desees:
6-8 horas: Para un labneh cremoso y suave, que tenga la consistencia de un dip.
24 horas: Para un labneh más firme, similar a un queso de untar.
48 horas o más: Para un labneh muy denso que se pueda moldear en pequeñas bolas de queso.
Desechar el suero: El suero que se escurre puede desecharse o utilizarse en otras recetas (como en panes o batidos). Después del tiempo de escurrido, desenrolla el paño y transfiere el labneh a un tazón limpio.
Servir:
Montaje: Coloca el labneh en un plato para servir y haz un pequeño hueco en el centro con una cuchara. Rocía generosamente con aceite de oliva virgen extra.
Decorar: Si lo deseas, espolvorea por encima zaatar (una mezcla de especias del Medio Oriente), menta fresca picada, o nueces picadas para darle un toque adicional de sabor.
Consejos adicionales:
Bolas de Labneh: Si decides escurrir el labneh durante 48 horas o más, puedes formar pequeñas bolas con las manos, colocarlas en un frasco y conservarlas cubiertas con aceite de oliva. Estas bolitas de labneh se pueden almacenar en el refrigerador durante varias semanas.
Variedad de usos: El labneh se puede disfrutar como dip con pan pita, como acompañamiento de vegetales frescos o asados, o como una alternativa saludable a otros quesos en ensaladas o sandwiches.
Sabor adicional: Puedes mezclar el labneh con ajo picado, hierbas frescas como el eneldo o el perejil, o incluso con un toque de limón para agregarle más sabor.
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