Sambousek de carne

Prepara la levadura: En un pequeño tazón, mezcla la levadura, el azúcar y 1/4 de taza de agua tibia. Deja reposar por unos 10 minutos hasta que la mezcla espume y esté activa.
Mezcla los ingredientes secos: En un bol grande, tamiza la harina y la sal.
Incorpora los líquidos: Haz un hueco en el centro de la harina y vierte el aceite de oliva y la mezcla de levadura. Agrega gradualmente el agua tibia restante mientras amasas hasta formar una masa suave y elástica.
Deja reposar la masa: Cubre el bol con un paño húmedo y deja reposar en un lugar cálido durante aproximadamente 1 hora, o hasta que la masa haya duplicado su tamaño.

Cocina la carne: En una sartén grande, calienta un poco de aceite a fuego medio. Agrega la cebolla picada y sofríe hasta que esté dorada y translúcida.
Añade la carne molida: Incorpora la carne molida y cocina, removiendo frecuentemente, hasta que esté dorada y completamente cocida. Rompe los trozos grandes con una espátula mientras cocinas.
Añade las especias: Agrega la sal, la pimienta, la canela (opcional), y el comino. Mezcla bien para que la carne absorba los sabores.
Incorpora los piñones y el perejil: Si estás usando piñones o almendras, tuéstalos ligeramente y agrégaselos a la carne junto con el perejil picado. Cocina todo por un par de minutos más, luego retira del fuego y deja enfriar.

Estira la masa: Una vez que la masa haya reposado, divídela en bolitas pequeñas del tamaño de una nuez. Enharina ligeramente una superficie de trabajo y estira cada bolita con un rodillo hasta formar un círculo delgado (de unos 8-10 cm de diámetro).
Rellena la masa: Coloca una cucharada de relleno de carne en el centro de cada círculo de masa.
Cierra el sambousek: Dobla la masa sobre el relleno para formar una media luna. Presiona los bordes con un tenedor para sellarlos bien y evitar que el relleno se salga al cocinar.

Freír: Calienta abundante aceite en una sartén o freidora a fuego medio-alto. Fríe los sambousek en tandas, dándoles vuelta hasta que estén dorados y crujientes por ambos lados (unos 3-4 minutos). Retíralos y colócalos en papel absorbente para eliminar el exceso de aceite.
Hornear (opción más ligera): Precalienta el horno a 200°C (390°F). Coloca los sambousek en una bandeja para hornear forrada con papel pergamino. Pincela con un poco de aceite o huevo batido por encima y hornea durante 20-25 minutos o hasta que estén dorados.

Sirve los sambousek calientes, acompañados de salsa de yogur o tahini si lo deseas. También puedes disfrutar de ellos como parte de un mezze, junto con hummus y ensalada tabulé.

Si prefieres un relleno de queso, puedes usar una mezcla de queso feta o ricota con perejil fresco picado. El proceso es el mismo, pero en lugar de carne, utiliza el queso para rellenar los sambousek.